No a la escultura de mujer arrodillada representando a Mariana Pineda en la Plaza Santa Adela de Huéscar

lunes, 10 de mayo de 2010

La macro incineradora de Huéscar bien merece un comentario frívolo del Alcalde de Huéscar

También podríamos añadir burlesco, cínico, provocador. Y otros que mejor no repetimos, que DahirA es una señorita educada en colegios públicos.

"... un pueblo, el de Huéscar, en el que no han faltado las muestras de repulsa al proyecto por parte de un grupo de ciudadanos, protestas que Agustín Gallego no entiende."No puede alarmarme así a la población", asevera, convencido de que, con las condiciones de seguridad medioambiental que han impuesto al proyecto "una fábrica de churros" no podría subir la persiana. " www.granadahoy.com 8 mayo 2010.

Muy acertado el comentario. Comparar una fábrica de churros (agua, harina, sal, manga expendedora y recipiente con aceite calentado al fuego; opcional papel de estraza para envolver y azúcar para espolvorear) con una macro incineradora (para residuos orgánicos, químicos, industriales, hospitalarios, algunos de ellos reciclables, y otros tóxicos y muy tóxicos), con capacidad para 2.000 toneladas diarias, lo que la convertiría, en la mayor incineradora del planeta, y con diferencia. Hasta ahora la mayor incineradora por gasificación está en Japón, y tiene una capacidad de 280 Tn/día, poco más de un 10% de lo que sería la de Huéscar.

Desde luego ha estado muy ocurrente el sr. Agustín Gallego. La pizquita de ironía se agradece. No parece nada afectado por el "grupo de ciudadanos" que se muestra contrario a la incineradora. Más bien parece distendido, con el sentido del humor fresco. Aunque, también se detecta una ligera sensación por parte del sr. Gallego de sentirse incomprendido. Seguramente por ese "grupo de ciudadanos". Menos mal que eso no afecta a su sentido del humor.

Pero es profundamente lamentable que un alcalde del PSOE, contrariamente a lo que ocurre con otros alcaldes del mismo partido en cualquier otro punto de este país donde han intentado construir incineradoras por gasificación, plasma o pirólisis, con mucha y muchísima menos capacidad que la proyectada en Huéscar se hayan opuesto rotundamente (en Monóver hicieron una moción de censura al Alcalde que la propuso que creo es -o era- del PP) y aquí en Huéscar la defiendan con uñas y dientes. La Comarca de Huéscar se está convirtiendo en un mundo al revés. Como dice el poema de Jose Agustín Goytisolo "érase una vez un lobito bueno, al que maltrataban todos los corderos" -segureños en este caso- o, parafraseándola: érase una vez unos corderitos malos que maltrataban al lobito bueno.

Como es profundamente lamentable igualmente, que ciertos políticos -hablamos de políticos locales-, una vez que tienen en su poder el contrato firmado por la empresa para gobernar y administrar (entiéndase por contrato mayoría directa en las urnas, o mayoría a través de pactos con otros partidos, como es el caso de Huéscar en esta legislatura, y por empresa el conjunto de la ciudadanía) se olviden del partido al que pertenecen, y por cuya trayectoria y siglas se les ha votado, y el contrato firmado por ambas partes, y personalicen a su antojo ese poder tomando decisiones transcendentales, controvertidas e incluso que pueden poner -y ponen- en riesgo la salud de los habitantes y la tierra, para su localidad y para todas las localidades cercanas, olvidándose de lo que son: políticos al servicio del pueblo. Nunca a costa del pueblo.

De igual forma que es profundamente lamentable que frente a decisiones que pueden suponer la destrucción de todo por lo que tanto se ha luchado y trabajado en los últimos años -agricultura, apicultura y ganadería ecológicas, turismo rural- y en lo que tanto han invertido las administraciones públicas y empresas privadas y, lo que es más importante: la salud de las personas, y el futuro humano y medioambiental del territorio, demuestren ser completamente analfabetos en el tema por el que apuestan, y no tener ninguna capacidad de análisis cuando alguien les presenta un proyecto, dándolo por bueno sin más. Y cuando se les empieza a hacer preguntas y a exigir garantías aquí y allí, por un@s y otr@s, se defienden como gato panza arriba: nos remiten a la propaganda que hacen de sí mismas las empresas promotoras/sumistradoras de esa tecnología. Ellos no se informan, no comparan, no piden informes, no tienen avales de ningún tipo. Luego dan por hecho que la ciudadanía no lee, no se informa, no compara, no busca informes, no entiende de avales. Y, sobre todo: a la ciudadanía su futuro y el de sus hijos, y el de la tierra les importa nada.

¿Tal vez esos señores alcaldes locales que han personalizado la política a su santo antojo, por encima del partido al que representan, están convencidos de que la ciudadanía es un borrico con anteojeras y una zanahoria delante (300 empleos, supuestos) que sigue caminando indefinidadamente, aunque esté cansada, muy cansada?.

DahirA.

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