No a la escultura de mujer arrodillada representando a Mariana Pineda en la Plaza Santa Adela de Huéscar

domingo, 26 de septiembre de 2010

Feriaovejuna

Ayer finalizó la edición de la Feria Nacional de la Oveja Segureña del 2010 en Huéscar, en la que DahirA ha participado con un stand de artesanías locales asociadas a la oveja: cerámica, textil y papel reciclado con motivos ovinos. Jarras, tazas, tazones, juegos de mesa, llaveros, broches, libretas, colgantes, con la oveja como protagonista.

En DahirA somos de la opinión que en una feria temática los contenidos tienen que ser temáticos. Si bien la feria de la oveja segureña de Huéscar tiene distintos apartados directamente relacionados con la temática, como es de recibo: exposición, concurso y subasta de animales, concurso de fotografía, festival flamenco de pastores ... a DahirA siempre nos ha parecido incongruente la carpa complementaria que alberga a las y los expositores, completamente ajena a la oveja segureña. Es como si nos ponemos un chandal y nos calzamos unos zapatos de tacón. Totalmente incongruente.

Completamente ajena no. De los casi treinta stand presentes, uno corresponde a ANCOS, la Asociación Nacional de Criadores de Oveja Segureña, aunque ni tan siquiera ocupa un lugar destacado en el espacio ferial. Y, por ser una feria agroganadera, el stand de la finca de investigación agrícola de Diputación en Huéscar, y el stand de abonos ecológicos BioFalcó, pueden considerarse asociados directamente; los de plantas ornamentales de jardín de Asspadise, y el de Viveros de Trufa, tal vez también.

Hemos echado de menos, y mucho, un stand propio de la Escuela de Pastores de Huéscar, con alguno o alguna de sus responsables hablándonos de los contenidos y los objetivos, de la composición del alumnado, del presupuesto transparente ...

Los stand destacados por su ubicación en el recinto son los del Ayuntamiento de Huéscar y la Cadena Ser, este año y años anteriores. No voy a hacer ningún juego de palabras al respecto.

El resto de expositores formamos una amalgama de productos: plantas de vivero, abonos ecológicos, jabones, cerámica, perfumes, embutidos de cerdo, quesos de cabra, pan y respostería, productos de la Alpujarra, estufas, licores de limón, cuero, GDR, forja, vinos, placas solares para uso doméstico, Oficina de Turismo, Guadalinfo, aceite, telefonía... Cierto que la mayoría pertenecen al territorio, al municipio de Huéscar y a la comarca, excepto el de alimentación de la Alpujarra y el de repostería de Quesada y los de cuero y perfumes que vienen de Granada; y un par más de stand que me quedé sin saber su procedencia. Pero la relación de unos y otros con la oveja segureña es prácticamente nula, o totalmente nula.

La feria de la oveja segureña de Huéscar acaba siendo una feria de difusión y comercialización general de productos locales y comarcales, así como de propaganda para el Ayuntamiento de Huéscar y otros entes allegados (Oficina de Turismo, Guadalinfo, GDR, Diputación, Cadena Ser).

El concepto que DahirA tiene de una feria temática de cordero y ovejas es bien diferente. Allá por el año 2007, a raíz de algunas conversaciones fortuítas con personal que trabaja -o trabajaba- en el Patronato Rodríguez Penalva, dependiente de Diputación de Granada, sobre este tema, y cuyas propuestas les parecieron interesantes y viables, nos preguntaron si querríamos participar en la organización del apartado ferial de expositores. Nuestra respuesta fue positiva, después de debatir en Junta Directiva la propuesta. Para ello, primero elaboramos un proyecto, cuya estructura consistia en antecedentes, objetivos, propuestas, modo de ejecutarlas, motivos que las justifican y presupuesto. Parece ser, que la persona que estaba interesada en nuestra visión y participación en ese apartado de la feria segureña, lo llevó a la reunión de la comisión encargada de organizar la feria. Lo siguiente y último que supimos al respecto es que el concejal del área de Ganadería y Agricultura nos convocó a una reunión, y en ésta nos hizo saber que la "íntima" amistad de quien suscribe con un Diputado Delegado no iba a servir para que nos entrometiéramos en los asuntos del Ayuntamiento, ya que las amistades de éste (en estas amistades no introdujo la palabra "íntima", lo que me podría llevar a un extenso análisis desde las perspectivas de igualdad de género, y de nepotismo, entre otras) eran muy superiores en número y relevancia política. Es el momento oportuno de reseñar que quien suscribe no ha tenido, tenía, ni tiene, amistad, ni simple ni compuesta, con ningún cargo político de ningún nivel. No porque rechace expresamente esa posibilidad, si no porque nunca se ha dado esa situación. Entre mis amistades, las más próximas a la política son un embajador (Jesús Riosalido, escritor además de diplomático; y esta amistad es por derivación, ya que es el marido de Carmina Casala, poetisa y gran amiga), y un cónsul. Pero estas personas pertenecen al mundo de la diplomacia, así que no se puede considerar que pertenezcan a la política propiamente dicha.

Hecho este inciso, vuelvo a la feria de la oveja segureña. En el proyecto que realizó DahirA, lo que era y sigue siendo una carpa ferial sin relación con la oveja segureña, aunque los organizadores la peguen artificialmente a la feria de la oveja, convertíamos ese espacio en un conjunto coherente con la temática de la feria, en el que cada uno de los stand mantenía una relación directa con la oveja, expandiendo las posibilidades de ésta. Así, los stand serían de carne, lana, quesos, gastronomía, artesanías, productos cosméticos con base de lanolina, tecnología temática, piensos; demostraciones desde el despiece (personalmente, no es algo que me atraiga), hasta el hilado manual de lana; exposiciones de arte (pintura, escultura) y fotografía (bueno, al menos, ya han incorporado un concurso fotográfico) y visitas a zonas naturales donde viven los rebaños en libertad, con alguna ruta de senderismo por cañadas reales; así como talleres abiertos para niños y niñas y personas adultas de jabones, marionetas de lana, tejido, teñido artesanal con tintes naturales; concurso de gastronomía, audiovisuales ... Todo oveja. Como sería lo propio de una feria temática. Un stand de lechugas en una fería temática de telefonía resultaría incongruente, ¿no?. Y poco eficaz. Pues eso.

En DahirA seguimos convencid@s de que la Feria de la Oveja Segureña de Huéscar en el apartado de la carpa comercial tiene que cambiar sustancialmente, en su esencia, incorporando los contenidos de ésta al tema objeto de la feria. Las razones para que se produzca ese cambio son muchas: potenciar las posibilidades de la oveja más allá de la cría para la venta al exterior, y el consumo de carne local; motivar a emprendedor@s a que se inicien en los diversos campos que ésta ofrece, y que tantas veces hemos repetido ya: aprovechamiento de la lana y la leche. Si bien ésta sólo ofrece la posibilidad de elaboración de quesos (quesos de granja, que tan bien define COAG), la primera ofrece múltiples posibilidades de aprovechamiento y empleos sostenibles, que a su vez impulsarían el desarrollo de otros sectores.

Una de las cualidades de la lana de la oveja segureña es que ésta es de grosor fino. Y precisamente este tipo de lana es la que contiene más lanolina, hasta un 75 %, frente al 20% de las lanas gruesas. Es utilizada principalmente en la elaboración de jabones, cosmética y farmacología. Aquí, en nuestra comarca, se podría aplicar directamente en cosmética y jabones, impulsando al mismo tiempo otros dos recursos propios para comercializar directamente: plantas naturales y artesanía. Y todo ello, dentro del marco del desarrollo sostenible comarcal.

Durante mis últimas pequeñas vacaciones visité una región que, si bien la cría de ovejas no es una de sus principales fuentes económicas, si que aprovechan la lana de éstas. Así que compré jerseys, bufandas, calcetines, guantes, gorras, elaborados en esa región con lana pura sin teñir. Las prendas huelen a lana. No todas las compras están en mi ropero, también compré para regalar a familiares y amig@s. Por que, además, tienen muy buenos precios, comparados con otros productos. Los comercios de esa ciudad no sólo ofrecen prendas y complementos de lana. También explotan otros productos relacionándolos con la oveja: tazas con una amplia variedad de dibujos, camisetas, utensilios de cocina ... Me pregunto como en un lugar donde la cría de ovejas es muy secundaria, y donde el desempleo prácticamente tiene porcentaje cero, le saben sacar tanto partido comercial y económico, y en otro lugar donde la cría de ovejas ocupa posiblemente el primer puesto en la escala de sectores económicos relevantes, no se le saca ninguno, habida cuenta además, que el desempleo alcanza cotas propias de los países subdesarrollados.

¿Quizás por eso en la primera región de la que hablo el desempleo es cero y aquí el alto porcentaje de desempleo es obsceno? ... No, no vamos a admitir las justificaciones de siempre: es que aquí nadie quiere emprender, es que aquí estamos muy atrasados, tendríamos que plantearnos un viaje-delegación para copiar el modelo de allí ... No. No son necesarios viajes de inspección y copia, ya se ha demostrado que son completamente ineficaces. Es necesaria una urgente política de sensibilización, formación rigurosa basada en las características propias de nuestra cabaña ovina y todos los derivados de ésta, difusión, apoyo, canalización eficaz de las ayudas disponibles ... Basta ya de utocompasión, complejos, copias, retales, despilfarros, autoengaños y engaños.

Para todo ésto, y mucho más, tendría que servir la carpa comercial de la Feria de la Oveja Segureña de Huéscar, que de tan grande presupuesto disfruta, y por tan grandes políticos es visitada: para desarrollar el sector ovino de la comarca en todas sus dimensiones. Porque si sumamos todos los empleos sostenibles que puede generar, los trescientos hipotéticos empleos que habría proporcionado la macro incineradora contaminante se quedan muy cortos.

Espabilen, señores políticos locales, que el tiempo de la bonanza económica subvencionada se acaba, y el tiempo del desarrollo insostenible ya se ha acabado, a pesar de la reforma laboral prevista que tanto lo intenta reimpulsar, tapando de paso el rotundo fracaso de la última etapa de desarrollo insostenible que todavía colea. Y aunque a ustedes no les preocupe pasar a la historia como los políticos que impulsaron con su pésima gestión el abandono de los pueblos, la diáspora hacia ninguna parte del siglo XXI de l@s habitantes de Huéscar y de la comarca, nosotros y nosotras, la ciudadanía, reivindicamos, exigimos, vivir en nuestra tierra y de nuestra tierra, conservando intacto al mismo tiempo todo nuestro patrimonio.

DahirA.


Declaración Universal de los Derechos Humanos, Art. 19: Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.

viernes, 24 de septiembre de 2010

El otoño que todo lo cambia

Es tiempo de cambios, ¿alguien lo pone en duda?

Entre el 21 y el 23 de septiembre se produce uno de los cambios anuales importantes en términos astronómicos: finaliza el verano y comienza el otoño. Los prolongados días de luz cegadora que han ido languideciendo progresivamente son ahora frescas mañanas y noches de luz más serena que empieza más tarde y termina antes. Es tiempo de recolección, de aprovisionamiento para el invierno estéril, oscuro, frío.

El septiembre del 2010 nos propone otros cambios que no guardan ninguna relación con la astronomía ni con la meteorología, aunque sí están estrechamente ligados a la tierra, a nuestra tierra. Unos se quedan en comarcales, otros traspasan las fronteras y pasan a ser nacionales. Pero unos y otros nos afectan y necesitan de nuestro concurso para producirse verdaderamente.

Así, el domingo 26 de septiembre, a las 12 del mediodía comienza en la Plaza del Ayuntamiento de Granada ciudad una manifestación contra el trasvase del río Castril, convocada por Ecologistas en Acción, Pueblo de Cortes de Baza y Plataforma de Defensa del río Castril.

https://www.ecologistasenaccion.org/spip.php?article18578

http://actuable.es/peticiones/pide-paralizacion-las-obras-destruyen-rio-castril

El cambio no es la manifestación en sí misma. El cambio se producirá cuando, pese a las malintencionadas intenciones y desmesurado empeño de quienes quieren apropiarse para beneficio propio en detrimento de l@s beneficiarios legítim@s de las aguas del río Castril, éstas sigan discurriendo completas por su cauce natural hasta que el embalse del Negratín las confunda con otras aguas, y una vez todas juntas redistribuirlas y repartirlas en función de las necesidades colectivas prioritarias de unas y otras localidades y zonas.

Pero para que se produzca el cambio es necesario que las personas del entorno del Castril tengamos conciencia de la importancia que tendrá en nuestras vidas presentes y futuras esa agua que ahora, por haberla tenido siempre, no somos conscientes de lo que supondrá el no tenerla. Y cuando digo entorno del río Castril quiero decir ciudadanía de Puebla de D. Fadrique, Orce, Galera, Huéscar, Castril, Castilléjar, Benamaurel, Cúllar, Cortes de Baza, Zújar, Freila, Cuevas del Campo, Baza y Caniles. Pase el río por nuestro término municipal o no. Si la pretendida macro incineradora de Huéscar nos afectaba negativamente a todos los habitantes de las dos comarcas, aunque estuviera ubicada en el término municipal de Huéscar, el cauce del río Castril también nos afecta positivamente a todos los habitantes de las dos comarcas.

Por eso es necesario que todos y todas salgamos a defenderlo. Ni siquiera nos podemos permitir el lujo de dejarlo en manos exclusivamente de las organizaciones ecologistas. ¿Has visto el cartel anunciando la manifestación?: Pueblo de Cortes de Baza ... ¡Pueblo de Cortes de Baza!. Ni asociaciones, ni plataformas, ni comunidades de regantes, ni ayuntamiento ¡Pueblo de Cortes de Baza!. Ecologistas en Acción-Pueblo de Cortes de Baza-Plataforma de Defensa del Río Castril. ¿Es hermoso, no?... Aún así, en ese cartel faltan los 13 restantes pueblos del Altiplano. Las 14 poblaciones deberíamos habernos unido para defender el río Castril frente a los intereses económicos de unas pocas personas de la comarca y de otros territorios.

No obstante, aunque ningún otro pueblo del Altiplano, además de Cortes de Baza se haya sumado colectivamente a la convocatoria de manifestación, ciudadanas y ciudadanos de todas las poblaciones podemos hacerlo libremente. Para ello, basta con que tengamos conciencia de la necesidad, de la importancia vital que tiene el río en nuestras vidas. Seamos arquitectas, empleados de la limpieza, amas de casa o jubilados. Hasta el domingo por la mañana todavía tenemos tiempo para pensar sobre ello, reflexionar, analizar.

Otro cambio importante en la última semana de septiembre de 2010 es la Huelga General convocada para el día 29 en protesta por la Reforma Laboral que fomenta la pérdida de derechos de las y los trabajadores. Es cierto que la huelga puede parecer una trampa, que está condenada al fracaso por la anunciada escasa participación.

http://www.publico.es/espana/338263/l/mayoria/espanoles/ve/motivos/-s

Pero es necesaria. Todavía recuerdo cuando familiares directos y amigos, no hace tanto tiempo, se encerraban en las iglesias, hacían huelgas de hambre; y se enfrentaban a detenciones, a los botes de humo lanzados por la policía, a la pérdida de salarios de los días en que estaban de huelga, a los despidos ... y eran trabajadores que tenían familias que mantener, niñ@s a los que pagar los libros del colegio, hipotecas, coches comprados a plazos a un alto interés bancario ... Lo que no tenían era miedo. Su dignidad, sus derechos, su libertad estaba por encima de todo.

De ahí, de esas huelgas sectoriales prolongadas, de esos encierros, nacieron convenios colectivos dignos, que cada año mejoraban un poco: un pequeño aumento de sueldo, una hora menos de trabajo a la semana, un día más de vacaciones, una guardería laboral, una mejor indemnización por despido, una contratación de personas con discapacidades, algunos días más de permiso maternal, permisos paternales, comedores laborales, plus de transporte, horas extraordinarias y festivas ...

Si en un momento de crisis económica como el que estamos sufriendo, debido precisamente a las malas políticas económicas nacionales y mundiales, somos los y las trabajadoras quienes vamos a pagarlo, debíamos reflexionar sobre ello, y a partir de éste momento, la economía se quede en manos de los trabajadores, seamos nosotras y nosotros quienes la diseñemos y gestionemos directamente. Porque yo sigo sin entender como beneficia al empleo el libre despido. En todo caso, beneficia al empleador, que hoy necesita puntualmente a cien trabajador@s y mañana no los necesita, porque ha decidido que ya ha ganado dinero suficiente. Cien por cien implicación de la clase trabajadora, que produce sin obtener a cambio una justa compensación, cero por cien de implicación de la clase empresarial, que solo recoge beneficios. Cuantos quiere, cuando quiere y como los quiere.

¿Eso es avance social, eso es desarrollo sostenible?

Quienes no se sumen a la huelga pensando que pueden despedirles la próxima semana y no podrán pagar la siguiente mensualidad al banco por la hipoteca de su vivienda, de las trescientas o cuatrocientas que todavía le queden, que piense que si ignora la huelga podrá librarse de las represalias de su empresa a corto plazo, pero que muy posiblemente, su empresa prescindirá de él o de ella cuando todavía le falten cincuenta, cien, doscientas mensualidades de hipoteca por pagar. Y que sus hijos e hijas, debido a la precariedad de los contratos a los que puedan acceder, ni siquiera podrán pedir una hipoteca ... Y no digo nada de lo que ocurrirá con los empleos femeninos: mujeres jóvenes con intenciones de tener descendencia, mujeres con descendencia. No olvidemos que los hijos e hijas todavía se consideran patrimonio exclusivo de las madres, nunca de ambos progenitores y mucho menos, un bien social.

El miedo que hoy nos impida movilizarnos para rechazar con firmeza los retrocesos laborales, se convertirá mañana en silenciosa miseria, muy superior a la actual. Miseria que heredarán nuestros hijos e hijas.

Nuestros miedos, nuestros silencios, nuestros consentimientos apáticos, nuestra comodidad rondando una precaria burguesía, van a hacer muy complicada y dificil la vida de la siguiente generación. Esa generación que hemos engendrado y parido, y por tanto, a la que le debemos respeto y a la que estamos obligad@s a enseñarles dignidad con el ejemplo.

DahirA.

Declaración Universal de los Derechos Humanos, Art. 19: Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Ni tú, ni yo, ni el otro, la lleguemos a ver ...

Hace muchos años, cuando la TV todavía era en blanco y negro y solamente nos ofrecía dos cadenas, ambas públicas, y yo era una pequeñaja, apenas adolescente, me gustaba ver y escuchar las noticias de la segunda (La2 que se llama ahora) que presentaba Felipe Mellizo. El presentador termina el programa de noticias introducciendo una breve presentación de la música y el autor o autora del que a continuación nos ofrecian un vídeo.

En uno de aquellos epílogos fue donde supe y escuché por primera vez a José Antonio Labordeta. No recuerdo que canción fue aquella, aunque sí recuerdo que me enamoró. Desde entonces, Labordeta siempre ha estado, de una forma o de otra, conmigo. Lo que más he admirado de él no es su faceta de músico, si no la de maestro (en realidad, catedrático). Soñaba con maestros como él en las aulas de las que entonces yo era alumna.

Luego le seguí, a veces, cuando podía, cuando recordaba el horario, en TV, con su "Un país en la mochila", aquel programa tan entrañable, de pueblo en pueblo, con sus preguntas inocentes, socarronas; sus palabras poéticas, precisas, directas; su voz peculiar, rotunda. Siempre me han gustado los pueblos perdidos, los pueblos anónimos, los pueblos que apenas son pueblos; los pueblos que a poco que te pongas a escucharlos tienen mucho que decir. Soy viajera rural desde hace décadas, lo reconozco. Labordeta, desde el respeto y el amor, ponía voz a esos pueblos, a las personas que los habitan, a los paisajes, a las estaciones.

También me gustó el Labordeta político, sus intervenciones incisivas, sin recovecos ni miedos. No conozco al Labordeta escritor, salvo por las letras de las canciones, a pesar de que tiene una veintena de publicaciones. Nunca me he encontrado de frente con uno de sus libros, por eso y no por otra razón no lo he leído.

Desde aquella lejana noche en que Felipe Mellizo "me" presentó al músico (coincidí años más tarde con aquel en Madrid, pero nunca tuve la fortuna de coincidir con Labordeta), el cantautor es el que ha seguido conmigo. En vinilo y en compacto. Si tuviera que elegir ahora dos canciones de entre todas, me quedaría sin duda con "Las uvas dulces": Cuando las uvas dulces/ van por el aire,/el otoño revienta/de parte a parte ... Las uvas están dulces en estos momentos, y Labordeta va por el aire, a disfrutar del intenso otoño que está a punto de aparecer.

La segunda canción que elegiría es, claro está, "Canto a la libertad", tantas veces tarareada, a solas y colectivamente: Habrá un día en todos/ al levantar la vista/ veremos una tierra/ que ponga libertad ( ) También será posible/que esa hermosa mañana/ni tú, ni yo, ni el otro/la lleguemos a ver/ pero habrá que empujarla/para que pueda ser ... Ay, amado Labordeta, cuanta razón tenías, te has marchado antes de ver esa libertad tan reclamada y tan deseada durante tanto tiempo. Los pueblos siguen quedándose desiertos, los campos abandonados; a veces, siento decírtelo, los destruyen adrede, y Ramón Cabeza sigue sin ir a clase.

Pero tú sigues conmigo, Labordeta, una vez más, aunque hoy muy bajito (cosas de Tunes), quizás porque hoy quieres paz para afrontar tu propia transición, si es que hay algún tipo de transición hacia alguna parte después de que el corazón deja de latir, "que queda de mí ..."

http://www.youtube.com/watch?v=i15eFc_BCu4

DahirA.

Declaración Universal de los Derechos Humanos, Art. 19: Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.

sábado, 18 de septiembre de 2010

Mientras dormían, las ventas se disparaban

Había una vez, en un remoto lugar de un remoto país de Europa, una comarca gobernada por vendedores y vendedoras. Eran vendedoras y vendedores natos. Lo llevaban en la sangre, era innato en ellos y ellas, necesitaban vender para sentirse realizados y realizadas. Lo hacían de forma espontánea. De cualquier situación, extraían la posibilidad de una venta.

El mayor problema de estas personas vendedoras es que no se dedicaban al comercio. Se dedicaban a la política, y su objetivo era gobernar. Y gobernaban, como acabamos de decir. Si hubieran sido comerciantes y comerciantas, habrían tenido un enorme éxito, traducido en beneficios económicos, que suprondría la prosperidad y el bienestar material de sus familias. Quizás, serían envidiados y envidiadas por vecinos y vecinas, empleados y empleadas, y serian constantemente puestos de ejemplo por quienes iniciaran o quisieran iniciar negocios: tenemos que hacer como fulanitos, menganitos y zutanitos.

Pero eran gobernantes y gobernantas en aquella remota región de aquel remoto país europeo. ¿Que puede vender un político o una política?. Seguro que ya has pensado en una respuesta: vendían promesas. Sí, es cierto: vendían promesas. Aunque eso era algo muy común entre la clase política de aquel tiempo y aquella región. Cada vez que se acercaban unas elecciones, y eso sucedía cada cuatro años, la inmensa mayoría de aspirantes a gobernar, apoyados por sus seguidores y seguidoras, durante algunos meses, se dedicaban casi en exclusiva a vender promesas. Promesas que, obviamente, estaban enfocadas a mejorar la vida de las demás personas: más empleo, más educación, más cultura, más infraestructuras públicas, más ventajas fiscales, más bibliotecas, más aparcamientos, más zonas verdes, más carreteras, más servicios de transporte público, más antenas que conectaran con el mundo a través de más herramientas, más sanidad pública, más libertad religiosa, menos burocracia, más ayudas a los sectores empresarial, autónomo, autoempleado, asalariado; más ayudas a las y los desempleados, a las amas de casa, a los jubilados y jubiladas, a los discapacitados y discapacitadas, a las y los estudiantes; a las personas maltratadas, excluídas, más desfavorecidas.

Además tenían una extraordinaria capacidad para convertir lo negativo en positivo. Dominaban las estadísticas de forma magistral. Jugaban con las estadísticas. Donde se había producido un empleo, demostraban que habían sido diez empleos. Donde había un tremendo socavón desde tiempos immemoriales, demostraban que habían asfaltado cuatro calles. Donde había un edificio histórico en ruinas desde varias décadas atrás, demostraban que se había aprobado un presupuesto enoooorme para convertirlo en el mejor edificio rehabilitado de los alrededores, gracias a su empeño y enorme esfuerzo. Y así con todo. Donde había más miseria, ellos y ellas decían que había más riqueza. Y lo hacían de forma que convencían sin mucho esfuerzo.

No obstante la envergadura que supone vender promesas, y venderlas bien, esa venta no les satisfacía plenamente. Era una venta anunciada. Y una vez que les habían comprado el producto ofertado, los votos, hasta las siguientes elecciones se quedaban sin otra cosa que vender. Su vida dejaba de tener alicientes. A veces, para calmar sus ansias de vender, aprovechaban pequeñas oportunidades que casi a diario les brindaba su cargo. Pero éstas eran también del sector de las promesas. Prometían puntual e individualmente a cualquier ciudadano o ciudadana que peticionara algo que estaba en sus manos concederlo o no. Pero eso era como beber a morro de un cartón de vino de mesa quien está acostumbrado a beber caldos de Rioja de la cosecha de 1982, adecuadamente oxigenado, en copas de vidrio de Mallorca. No les producía ninguna satisfacción. Más bien les provocaba más ansiedad, llegando incluso en ocasiones a arrepentirse del cargo que ocupaban, y contar el tiempo restante hasta las siguientes elecciones, jurando y perjurando que no volverían a ofrecerse para el mismo puesto.

Esa ansiedad, esa desazón, les convertía en personas agrias, huidizas, adentrándose en una espiral de promesas gratuitas, estúpidas, sin sentido. A veces, perdían la noción de la realidad, se sentían perseguidos, denunciaban a los vecinos y vecinas, iniciaban campañas de desprestigio hacia ellos y ellas, actuaban como víctimas, se inventaban mundos propios y pagaban a profesionales de diversos sectores para que los apoyaran y difundieran su mundo de falacias. Y la egolatría se apoderaba finalmente de ellos y ellas.

Pero ni siquiera ese estado de pérdida de la realidad mitigaba su necesidad intrínseca de vender. Y, claro, lo tenían complicado. Su trabajo más bien consistía en buscar y recoger para repartir. Esa era su obligación. Y eso no se podía considerar ventas.

Fue entonces cuando se dieron cuenta que sí que podían vender sin renunciar a gobernar. Se dieron cuenta que los ciudadanos y ciudadanas les habían otorgado la confianza para custodiar los bienes comunes; esa especie de fideicomiso les permitía manejarlos durante un período de tiempo sin necesidad de rendir cuentas, les habría una puerta para saciar su necesidad obsesiva: podían venderlos. Podían vender el patrimonio de cualquier índole que estuviera a su cargo. Ya fuera éste una montaña o un río. Ya podía ser esa venta contraria a las leyes vigentes: el gusanillo de placer que les producía la posibilidad real de cerrar una venta era superior a ese pequeño detalle. Tenían amigos y amigas que los apoyaban, que distraían a las personas para hacerles creer que no era cierto que se estuviera vendiendo nada. Consideraban enemigos a todos aquellos y aquellas que les recriminaran sus actuaciones.

Así fue como en aquella remota región de aquel remoto país, en un mismo espacio de tiempo se solapaban las ventas: edificios, campos, montes, rios, territorio en general. Unas y otras tapadas con dilapidaciones económicas de la más variada índole: escuelas para enseñar a los pastores de toda la vida a ser pastores, viajes en autobús de los propios implicados para el reconocimiento de la comarca y comarcas aledañas, tal vez con el propósito de autorehabilitación; inauguraciones de edificios inservibles, extrañas señalizaciones, grandes fotografías de alguno de estos vendedores instaladas en lugares públicos, aprovechando la cercanía con un personaje muy famoso, cual dictador que se precie; fotografías junto al señor que llegaba para infundir miedo a las personas que no estaban de acuerdo con su proceder, y actuaciones similares acumulables y acumuladas.

Las promesas incumplidas, con las que en realidad, ya contaban quienes hicieron creer que las creían, y la suma de los numerosos intentos de vender el patrimonio, algunos de ellos consumados, despertó del largo letargo en el que estaba sumida la ciudadanía de aquella remota región, y se produjo una revolución escalonada y pacífica, como los mismos principios del feminismo, en la que se empezaron a reivindicar derechos fundamentales: derecho al trabajo, derecho a la libre expresión, derecho a conservar la tierra, ...

De ahí surgió el rechazo de la ciudadanía por las y los gobernantes-vendedores y exigió cambiar gobiernos por gobernanzas, mucho más cercanos a la justicia social y el desarrollo sostenible, permitiéndoles de esta forma una vida con futuro que pudieron disfrutar sus descendientes durante muchas generaciones.

En definitiva, en aquella remota región de aquel remoto país, fueron felices y comieron truchas comunes, que habían dejado de estar en peligro de extinción con la implantación del sistema de gobernanza, en el que tenía una clara y activa participación la ciudadanía, que hizo de la conservación en buen estado del patrimonio existente uno de los objetivos prioritarios.

DahirA.

Declaración Universal de los Derechos Humanos, Art. 19: Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.

martes, 14 de septiembre de 2010

Parejas imposibles

La suma de uno más uno forma una pareja, pero no siempre esta pareja es compatible. En el Altiplano de Granada, la mayoría de los gobernantes locales y comarcales han adquirido la costumbre de unir uno y uno y dar por hecho que el dos resultante, la pareja, es perfectamente compatible, sin detenerse a analizar si la convivencia pacífica y saludable de esa pareja es posible o no. Y sin pararse a pensar si la ciudadanía entenderá y aceptará a esas parejas que nos presentan en sociedad con vestimentas de alta costura y amplias sonrisas artificiales, y a las que se les ve a la legua que son parejas desunidas, de conveniencia, ágrias y sin intenciones de tener hijos.

Digo ésto porque hoy, echando un vistazo a la Agenda 21 Local del Ayuntamiento de Huéscar ha aparecido subliminalmente una de esas parejas imposibles, aunque ni siquiera estaba vestida para la ocasión; apenas estaba cubierta con prendas de andar por casa en verano, ya que se limita a resumir los principios de la Agenda21 y algunos de sus capítulos, sin ningún compromiso, implicación, o propuesta local al respecto. Supongo que ese texto es mero trámite a raíz de las dos reuniones a las que convocaron a la ciudadanía a través de l@s representantes de asociaciones y entidades a finales del invierno del 2009, y que se quedó ahí. Y por que, además, queda bonito, todo hay que decirlo.

Leyendo los artículos de la Agenda21 que transcriben es donde se detecta a la falsa pareja: "El capítulo 28 tiene tiene epecial interes para los municipios y regiones. Se hace un llamamiento a todas las comunidades locales para que creen su propia Agenda 21 Local (A21L), que recoja los objetivos generales de la A21 y los traduzca en planes y acciones concretos para cada localidad específica."

Primero, el ayuntamiento de Huéscar se ha limitado a recoger los objetivos generales de la Agenda21, pero no los ha traducido en planes y acciones especificos para la localidad. No se debió encontrar con ánimos, en su momento, ni siquiera para realizar un copia y pega y redondear de esta forma el contenido de esa página, aunque el contenido careciera de sentido.

Segundo, por que por la misma época, según propias declaraciones del ayuntamiento, ya estaban elaborando el proyecto para la macro incineradora, sobre la que no detectaron ninguna incompatibilidad con el desarrollo sostenible y con los principios de la A21L hasta que poco más de un año después Greenpeace les envió un informe desaconsejándola por varios motivos de peso.

Es decir, mientras organizaban reuniones para informar sobre la A21L y supuestamente elaborar planes para desarrollarla, estaban elaborando un proyecto para una actuación absolutamente insostenible desde cualquier punto de vista. Estaban sumando uno y uno con resultado de pareja imposible, promocionándola con total naturalidad, como si fuera una pareja con altos indicios de autenticidad y compatibilidad, pura afinidad.

Tampoco se sonrojaron yendo todavía más allá, proponiendo a la ciudadanía un trío, según mi opinión, nada saludable y sí bastante obsceno: Agenda21 Local-Macro Incineradora-Escuela de Pastores. Los tres retozando juntos en la misma cama, con cámaras grabando para que la ciudadanía disfrutara libremente del espectáculo.

En el capítulo 7 habla sobre el desarrollo sostenible y los asentamientos humanos: el concepto “Desarrollo Sostenible” no se limita únicamente a aspectos ecológicos del desarrollo, sino que comprende además, una determinada forma de organizar la realidad económica y social de la colectividad que propicie la viabilidad a largo plazo de este tipo de desarrollo.

Posiblemente, el Ayuntamiento de Huéscar entiende la aplicación del capítulo 7 de la A21 como la promoción de cualquier actividad que dañe seriamente al territorio y a la población, simultaneándola con otras promociones de actividades basadas en la ecología. El Ayuntamiento de Huéscar nos ha presentado a una pareja, diciéndonos que es la pareja perfecta, con uno de sus miembros altamente contaminante y el otro completamente ecológico.

Aunque tenemos otros ejemplos comarcales de presentaciones en sociedad de parejas imposibles: Baza ciudad del agua-Baza no tiene agua suficiente para consumo humano. Turismo Sostenible-Implantación de macro marraneras. Ampliación zonas de regadío-Desvío del caudal del río a otras zonas. Petición de Zona Natural-Urbanización de esa misma zona. Turismo de Naturaleza-Destrucción del ecosistema. Fomento Empleo-Negación licencias apertura negocios sostenibles. Planes igualdad de género-Actuaciones machistas. Activistas por las libertades fundamentales-Represores de las libertades fundamentales. Y seguro que se me quedan en el teclado algunos ejemplos más.

Esta bipolaridad institucional comarcal, esa inocencia a la hora de presentarnos a parejas incompatibles, a cada momento más patente, más manifiesta, sumando y sumando, es menos entendida y aceptada cada día por la ciudadanía. Es cierto que la ciudadanía todavía somos tímid@s y nos cuesta expresarnos en voz alta y en público. Pero de todos y todas es sabido que la timidez, salvo patologías aisladas, se vence con el tiempo. La bipolaridad también es controlable con un buen tratamiento.

Las parejas imposibles, a fuerza de presentárnoslas una y otra vez, son cada vez menos creíbles, las detectamos antes. Queremos parejas en las que intuyamos amor, afinidad y libertad. Parejas en las que podamos creer que tendrán larga vida, que se les intuya la sinceridad. Parejas como Ecología-Desarrollo Agricultura Autóctona Natural. Desarrollo Sostenible-Consumo de Proximidad. Turismo Sostenible-Artesanía. Empleo-Aprovechamiento Recursos Endógenos. Progreso-Transporte Público. Democratización Horizontal-Desarrollo de las NTICs. Igualdad de Géneros-Desarrollo Sostenible. Y los demás ejemplos que también se me quedan en el teclado por hoy.

Admitimos tríos además de parejas. Incluso admitimos dobles parejas. Siempre que cada uno de los miembros y de las miembras que los compongan tengan desarrollado el sentido común y su objetivo sincero sea sumar. Nunca restar. Nunca engañar. Y menos aún, confundir en un baile eterno de paso hacia adelante, paso hacia atrás, pausa que me he torcido el tobillo, no recuerdo nuestra cita, ahora he pensado que me desapunto del curso de baile y me apunto al curso de encaje de bolillos, quiero bailar un tango y una jota al mismo tiempo, esto es un pasodoble pero le voy a decir a mi pareja que es una pieza de heavy metal ...

DahirA.

Declaración Universal de los Derechos Humanos, Art. 19: Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Lodo y truchas muertas

"El paisaje es memoria. Más allá de sus límites, el paisaje sostiene las huellas del pasado, reconstruye recuerdos, proyecta en la mirada las sombras de otro tiempo que sólo existe ya como reflejo de sí mismo en la memoria del viajero o del que, simplemente, sigue fiel a ese paisaje."

Así comienza "El río del olvido", de Julio Llamazares. No es una novela como tal; es un viaje hacia atrás del escritor, convertido en viajero, desde la desembocadura del río Curueño hasta el nacimiento de éste. Un río que entre medias le trasvasaron las aguas de otro río, el Porma, y le construyeron un pantano, el Begamián, anegando pueblos que quedaron sepultados para siempre bajo sus aguas o pueblos que por quedar a la orilla y haber sido despojados de los prados y tierras que eran el medio de vida de quienes habitaban esos pueblos, sus habitantes no tuvieron otra alternativa que la emigración, quedando completamente desiertos hasta que el tiempo los fue convirtiendo en ruinas.

Hace unos unos cuantos veranos, libro en mano y mochila y tienda de campaña en el maletero del coche -no fuimos tan aguerridos como Llamazares para atrevernos a emprender el camino a pie-, decidimos hacer el mismo recorrido que el escritor para descubir los lugares que ya él nos había descubierto. Desde Ambasaguas, a las afueras de León ciudad, hasta el puerto de Vegarada, en la frontera con Asturias, el recorrido, aunque sea en coche, es lento, hermoso y triste. Lento porque cada pueblo, por pequeño que sea o deshabitado que esté, y cada recodo del camino es un mundo absoluto que requiere de su tiempo para aprender a vivirlo. Hermoso porque el paisaje, montañoso, de vegetación profusa e intensa compone un tapiz tupido que nos asombraba en cada momento. Y triste porque a cada paso descubríamos, sin quererlo siquiera, la pérdida de población de los municipios, la destrucción integral de pueblos y aldeas, el abandono de las tierras de labor, convertidas ya en una maraña de maleza salvaje, mitad hermosa, mitad dolida y doliente.

Los pantanos de Porma, Riaño y Barrios de Luna, los tres en la provincia de León, son pantanos inútiles, salvo para las hidroeléctricas. Poblaciones enteras se vieron despojadas de su identidad, de sus raíces; fueron expulsadas de su tierra sin ser consultadas, sin su permiso. Con engaños, triquiñuelas y promesas de una mejor vida aderezadas de indemnizaciones económicas. Poblaciones enteras que se vieron forzadas a iniciar una nueva vida en lugares alejados, extraños, cada familia donde pudo, donde supo, donde creyó que tenía posibilidades, engañándose a si misma para no morir de la tristeza. Poblaciones enteras que fueron pasto fértil para las zonas industriales que requerían mano de obra no especializada y necesitada de un motivo para creerse que vivía mejor así. Poblaciones que sin saberlo, iluminaron con su desgracia a miles de hogares y enriquecieron a algunas empresas.

Yo también vengo de una tierra de trasvases, aunque esa tierra pertenece al otro lado, al lado oscuro de los trasvases: la tierra de los beneficiados del trasvase Tajo-Segura. La tierra que para seguir prosperando ansía lo que no tiene y se lo reclama al vecino que sí lo tiene, creyéndose en su derecho propio. Y, basándonos en el principio de la justicia social, el reparto equitativo de la riqueza, no es descabellado del todo exigir que se comparta ésta. Pero, ¿cuando el sistema capitalista ha destribuido la riqueza equitativamente?. Cuando un sistema basado en la economía capitalista exige parte de los bienes de otro no lo hace en nombre de la prosperidad común, lo hace en su nombre propio y para su propio beneficio exclusivamente.

La agricultura murciana, antes del trasvase estaba dividida en tres grandes sectores: la huerta, regada por el Segura y algunas acequias secundarias que producía frutales, verduras, legumbres y hortalizas; las zonas de regadío alimentadas por el Taibilla, plantadas de viñas y cítricos, especialmente limones, y las zonas de secano en las que se cultivaban almendros, olivos y cereales. Una agricultura bastante equilibrada si tenemos en cuenta además que también teníamos el aprovechamiento de las moreras para criar gusanos de seda, se inició el cultivo de la alcaparra, y el noroeste de la provincia cuenta con los campos de arroz. Equilibrada y autosuficiente, con producción suficiente además para la exportación. Se practicaba de forma natural lo que hoy se llama consumo de proximidad y además, era una fuente de ingresos para la región, que a su vez generaba otras fuentes de ingresos a través de las empresas transformadoras y auxiliares: fábricas de conservas, de envases, de palés, de transportes ...

El trasvase Tajo-Segura, que tiene sus origenes en el año 1933, que se continuó el proyecto durante la dictadura, y finalmente se puso en funcionamiento ya en época democrática, en el 1979, en principio estaba ideado para compensar de la escasez hídrica natural del sureste peninsular, ha ido acumulando despropósitos de todo tipo. La inversión prevista aumentó casi un trescientos por cien, las previsiones de caudal nunca han superado la mitad de las previstas, la superficie de nuevo riego no supera el 25 % de la cifra recogida en el Plan Hidrológico de la Cuenca del Segura, se acogieron al régimen de regadío tierras a margen de su valor agrícola ... Según la Confederación Hidrográfica del Segura, el déficit hídrico se ha multiplicado por cuatro desde entonces.

Y el territorio agrícola de la región está destruido. La agricultura tradicional ha desaparecido en su práctica totalidad. Donde hubieron almendros y olivos -recuerdo haber jugado entre ellos y participar de expectadora en la época de recolecta- ahora hay lechugas verdes y rojas, brócoli, alcachofas; unas y otras cultivadas intensiva y artificialmente, con mucha química, que empobrece considerablemente los nutrientes de la tierra y exigen más agua para hacerlas rentables, aunque se hayan instaurado los riegos por goteo, de cuyas plantaciones se extraen cosechas de muy baja calidad, rayando la insalubridad, que está dando lugar a nuevas enfermedades en el ser humano. Cosechas explotadas por empresarios, no por agricultores. Empresarios que durante años se han valido de la mano de obra barata y sin ningún derecho de los inmigrantes sin papeles (primero fueron los gitanos, hasta que éstos empezaron a exigir los derechos básicos de los trabajadores, a los que sustituyeron por marroquíes hasta que éstos también empezaron a reclamar derechos y los sustituyeron por sudamericanos inocentes hasta que dejaron de serlo, y ... hace unos años era normal ver a un numeroso grupo de inmigrantes sin papeles agrupados en torno a una plaza al amanecer y al patrón eligiendo a dedo quienes trabajaban ese día; normalmente, nunca elegía a los que habían trabajado el día anterior).

Hoy, Murcia tiene una tierra empobrecida y desertificándose a pasos acelerados, cada vez con más necesidades de agua, muy dependiente de los precios y las exigencias que marca Europa (hace 30 años los precios, las variedades y categorías las marcaban los propios agricultores), con una clase trabajadora exenta de derechos, y un índice de desempleo algo más de cuatro puntos por encima de la media nacional. Esos son todos los benefícios que ha reportado a la región el tan traído y llegado trasvase Tajo-Segura: empobrecimiento del territorio y de la población y el enriquecimiento de unos cuantos empresarios.

Por eso no llego a entender, por más que lo intento, qué pretenden quienes están defendiendo con tanta pasión el trasvase del Castril; por que esa vehemencia y premura en acometer unas obras que destruyen un territorio para supuestamente beneficiar a otro. Por qué están haciéndolo por encima de la ley y con tanta urgencia. Por qué están acobardando a la población y a l@s propietarios de las tierras imponiéndoles multas cuantiosas acogiéndose a que se reúnen y manifiestan sin permiso (¿Donde dice la Constitución Española del 78 que se necesita permiso de reunión?). Asustan y coaccionan a agricultores cuando debieran estar junto a ellos defendiendo sus legítimos derechos frente a cualquier agente exterior que pretendiera arrebatárselos; los derechos de l@s agricultures y de todas las personas que viven en un medio rural y quieren hacer de éste su modo de vida y su economía; esos derechos que son los derechos de la tierra, los derechos de la sostenibilidad, los derechos del futuro. En cambio, dividen a la población, fomentan el odio, dificultan la convivencia, proyectan miedos ancestrales.

¿Qué intereses propios esconden detrás de esas incongruentes y nefastas actuaciones que les están llevando a destruir el territorio, mermar la calidad de la convivencia, fomentar la emigración?. ¿En que derecho, en que ley, se basan para hacerlo?.

"El Viajero avanza por un pasillo lleno de lodo y truchas muertas, atrapadas al retirarse el agua ...". Julio Llamazares, "Retrato de bañista".

DahirA.

Declaración Universal de los Derechos Humanos, Art. 19: Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.

jueves, 9 de septiembre de 2010

Mi tierra herida



Es miércoles, 8 de septiembre.

Esta mañana me levanté temprano, con la intención de bajar al río para unirme a los vecinos y vecinas que están tratando de impedir que las máquinas sigan abriendo la zanja en la vega junto al río, para colocar las tubos del trasvase.

Bajando por la Cuesta del Salitre me encontré con un vecino que subía en su furgoneta, y que al verme se paró para decirme que si iba al río no encontraría a nadie, pues hoy habían decidido no actuar ya que había una reunión en Granada, en la Delegación de Medio Ambiente. Una vez más, el pueblo llano con su sabiduría innata está siendo más respetuoso, conciliador y tolerante que las administracciones públicas y los polític@s a los que tod@s pagamos (se supone que para que nos representen y velen por nuestros derechos). Y yo que había pensado que con un poco de suerte algún policía musculoso me cogería en brazos para quitarme de enmedio.¡Qué le vamos a hacer!. Quizás tenga más suerte mañana.

No conozco todavía el resultado de esta reunión, pero sí se de antemano que había muy pocas esperanzas de conseguir detener la obra.

A lo que iba. Como ya estaba en la calle, decidí seguir caminando y darme un paseo como hago otras veces. Continué por la carretera de Los Laneros hasta Las Cábilas donde empieza el camino que llega hasta la orilla del río. En este punto, dudé entre seguir hasta el río o subir hasta la parte alta de detrás del pueblo, desde donde la vista del pueblo y la vega es espectacular. Así que retrocedí unos metros para subir por el camino que empieza en la Cueva de Steven. Al final de la cuesta, ya en zona llana me paré y me giré a contemplar el paisaje. Mientras subes, el pueblo y la vega quedan a tu espalda. En este punto del camino el campanario de la iglesia está situada justo en el centro del Cerro Jabalcón. Conforme vas avanzando por el camino, el campanario aparece con un fondo distinto. Es como si fuera girando al ritmo de tus pasos.

Seguí subiendo, ahora por la Cuesta de Castilléjar; al llegar arriba, el pueblo aparece allí abajo y el campanario de la iglesia tiene ahora de fondo Sierra Nevada, en la que este año todavía permanecen neveros del invierno anterior. El camino, ahora llano otra vez, termina donde se une con el que sube del cementerio por el otro lado del pueblo. Allí doy la vuelta para llegar hasta una pequeña atalaya, desde donde se divisa todo el paisaje que me rodea, quedando el pueblo abajo. En este punto, el campanario tiene de fondo los barrancos que bajan al río; a la derecha las Cuevas del Cubete; a la izquierda, Las Cucharetas, Sierra Nevada y Jabalcón. Y girando la cabeza un poco más a la izquierda, el cementerio.

La mañana es casi perfecta. El sol luce alto y algunas nubes acarician al Cerro Jabalcón. Una brisa fresca mueve un pino solitario que hay junto al camino. Su sonido se une al sonido casi silencioso de lo que me rodea: un pájaro, el ladrido lejano de un perro, un tractor; los sonidos cotidianos del pueblo que despierta lentamente.

He hecho este camino muchas veces y disfrutado de la paz y la tranquilidad; de la soledad, en compañía de la naturaleza, ahí subida en mi atalaya.

Pero hoy, a lo largo de todo el camino, había un sonido disonante, fuera de lugar. Era el sonido de las máquinas cortando chopos, abriendo la tierra, hiriendo la vega. Y no era solo un sonido mecánico. Era como un lamento, un largo y desgarrador lamento de la tierra herida. Y por un momento, el río, la tierra y yo hemos llorado juntos como un solo ser.

Poco después, el sonido de las máquinas paró, y durante el camino de vuelta a casa no se han vuelto a escuchar. Supongo que sería la hora del almuerzo. Pero yo entré en mi casa con la sensación de que el llanto las paró.

DahirA.

Declaración Universal de los Derechos Humanos, Art. 19: Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

"Este río es nuestra madre, que nos ha criado esta vega ..."

¿Que tipo de democracia tenemos en este país?

¿Qué entienden nuestr@s polític@s por desarrollo sostenible?


http://www.youtube.com/watch?v=bociGmlAqPA

http://www.youtube.com/watch?v=qCLfALCTnXM

http://www.youtube.com/watch?v=qCeNW8CLEAo

http://www.youtube.com/watch?v=hengnWub_oo

DahirA.

Declaración Universal de los Derechos Humanos, Art. 19: Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.

martes, 7 de septiembre de 2010

¿Hemos dado nuestro visto bueno a alguien para que destruya nuestro territorio?

Mientras yo contemplaba incrédula desde un mirador como por una de las principales avenidas de una ciudad de medio millón de habitantes el tráfico en hora punta consistía en catorce autobuses, tres taxis, dos bicicletas, dos furgones de reparto y un coche, y que entre todos apenas hacían notar la contaminación acústica en el entorno, y menos aún algo parecido a un atasco, aquí, en mi querida tierra, estaban ocurriendo hechos bien diferentes, como leía en el subtítulo -el titular me vergüenza reproducirlo- de la página:

http://www.riocastril.com/

"Unos 100 agentes de los cuerpos especiales de la guardia civil, a las órdenes del subdelegado del gobierno en Granada Antonio Cruz, han acompañado esta mañana a las máquinas que están destrozando el Río Castril a su paso por Cortes de Baza. Con total impunidad y recordando épocas pasadas, se han enfrentado a una marcha pacífica que contaba con niños, mujeres, personas mayores ... cuyo único propósito es la defensa de sus tierras de cultivo y del Río Castril."


Cierto que entre uno y otro lugar mediaban unos tres miles de kilómetros, pero ambos pertenecen a la UE y se presupone que debería existir una cierta cohesión entre uno y otro. Cierto que l@s españoles nos amparamos en nuestros cuarenta años de dictadura franquista y el consiguiente retraso respecto a Europa que ello supuso. Cierto que nos gusta presumir de nuestra idiosincrasia latina y mediterránea. Pero ni uno ni otra me convencen ni me hacen comprender la barbarie que nuestros gobernantes están llevando a cabo con el río Castril y su entorno, empleando para ello cualquier recurso disponible, desde hacer prevalecer una sentencia del tribunal de justicia provincial sobre una sentencia del Tribunal Supremo, hasta desplazar a Cortes de Baza a tantos agentes del cuerpo especial de la guardia civil (por cierto, ese desplazamiento, ¿cuanto nos cuesta en euros a la ciudadanía?).

Eso sin contar con los motivos alegados por los gobernantes comarcales acerca de la imperiosa necesidad del trasvase del río Castril: previniendo futuras épocas de sequía y las consecuencias negativas para Baza que pudieran derivarse de ellas, descartando que las demás poblaciones sufran consecuencias negativas durante un periodo de sequía (Baza, el ombligo del Altiplano de Granada); que Baza necesita agua potable y la del río Castril es de mejor calidad que la del Negratín, aunque del Negratín se hayan aprobado 7 Hm3 para consumo humano en el Almanzora (parece que los humanos y las humanas del Almanzora tienen un paladar menos exquisito y un estómago más resistente que los humanos y las humanas de Baza); que si el río hay que entubarlo desde el Portillo para evitar invertir en una bombeadora, al mismo tiempo que hay proyectada una bombeadora en el Jabalcón ... No quiero repetirme excesivamente, pero esas alegaciones son propias de niños de entre cuatro y cinco años justificándose por algo que sus educadores y educadoras les han dicho que está mal y que no hay que hacerlo, y pese a ello, lo han hecho.

Eso sin contar tampoco con que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, que por un lado se queja por la merma del caudal del Guadalquivir (alimentado en parte por las aguas del Castril) que afecta a los regadíos de Córdoba y Sevilla aprobara en su momento con tanta premura el trasvase para ¿Baza? ¿Regantes del Almanzora? y siga empeñada en el trasvase, con el apoyo de la Delegación del Gobierno en Granada, ambas obviando la sentencia del Tribunal Supremo y la Directiva Marco de Aguas Europea.

Y sin contar con la extraña red de intermediarios que al parecer existe entre la Comunidad de Regantes del Almanzora y la Comunidad de Regantes del Jabalcón que a su vez busca intermediarios para que intermedien con el alcalde altiplánico disidente del trasvase (Ayuntamiento de Cortes de Baza) y lo convenzan para que se una a ellos y deje de interponerse al trasvase. Intermediarios regados convenientemente con billetitos de curso legal, procedencia secreta y sin factura, claro está. Ayuntamiento que seria convenientemente recompensado, por supuesto. Lo que nos lleva, sin mucho pensar ni deducir, que los ayuntamientos altiplánicos que tan fervientemente defienden el trasvase y tan infantiles justificaciones hacen de él, ya han sido recompensados de una forma u otra.

Lo que a su vez nos lleva a pensar que el caudal del río Castril, a pesar de la escasez de agua y del sistema agrícola tan absolutamente insostenible que permiten practicar, no es suficiente para que levante tantas pasiones entre el Delegado del Gobierno en Granada, el Ministerio de Medio Ambiente, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, la Comunidad de Regantes del Almanzora, la Comunidad de Regantes del Jabalcón, los alcaldes de Baza, Castril, Zújar, Benamaurel y no se si alguno más y que impliquen incluso a los tribunales de Granada y envíen a un centenar de agentes del cuerpo especial de la guardia civil a Cortes de Baza para que las obras no se retrasen ni un día más, pese a que la sentencia del tribunal de Granada está recurrida, y por tanto, no es firme aún, ni quizás ésta, aunque en su momento sea desfavorable a los defensores del río, sea la última vía legal contra el trasvase a la que puedan acogerse quienes defienden al río.

Llegar a la deducción de que existen poderosos y ocultos intereses económicos que pasan por el entubamiento de parte del caudal del río Castril, la pérdida de ecosistema y de la agricultura de esa zona del Altiplano para poder llevarlos a cabo posteriormente no es de nota, más bien es bastante básica. El aprovechamiento y reparto equitativo del agua no es el objetivo. Ni siquiera la prosperidad de unos basada en el apropiamiento ilegal del agua a otros es el objetivo. En realidad, el caudal del río Castril parece que les importa bien poco a quienes quieren modificarlo. Lo que les importa son las consecuencias negativas que tendrá en el entorno natural y agrícola y en el sistema económico actual de la población, de las cuales surgirá un macro proyecto salvador para los habitantes del Altiplano, vaya usted a saber en que consiste ese supuesto proyecto salvador de territorios mal gobernados y empobrecidos.

¿Por qué nos empeñamos en apoyar con nuestro voto a quienes trabajan con tanto ahínco para que sigamos siendo subdesarrollados e insostenibles?. ¿Por qué nos asusta ser ciudadanos y ciudadanas de primera en la UE? ¿Por qué no salimos la ciudadanía en masa, esos sesenta mil habitantes que dicen que somos en el Altiplano de Granada, a plantarle cara a quienes quieren destruirnos nuestro proyecto de vida digno y sostenible y el de las generaciones futuras? ...

NO AL TRASVASE DEL RÍO CASTRIL. NO A LA DESTRUCCIÓN DE NUESTRO TERRITORIO.

DahirA.

Declaración Universal de los Derechos Humanos, Art. 19: Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.