¿Cuantas cooperativas de pequeño formato para desarrollar los recursos y el consumo de cercanía se podía haber creado con esos millones de euros?
La pregunta la he extraído del foro
13 julio 2011, hilo Pinar de la Vidriera: viable sí, viable no.
Los millones de euros a los que se refiere la pregunta son los millones de euros que las administraciones han ido echando, como si se tratara de un pozo sin fondo. El hotel Pinar de la Vidriera lo inauguraron hace siete años, y desde entonces permaneció cerrado, hasta el verano pasado cuando, tras una nueva rehabilitación, aunque de menor calado que la primera, lo abrieron para volver a cerrarlo pocos meses después, alegando vacaciones del personal y reformas. En realidad, debió ser por inviabilidad, y también, porque el socio de la Junta en dicha empresa, la cadena de hoteles Hotelux, está en quiebra o a punto de quebrar. La "inversión" en el hotel de la Vidriera ha sido de unos seis millones de euros, unos mil millones de las antiguas pesetas, que ahora deben estar descansando plácidamente en el fondo del pozo y quizás pronto disfruten de la compañía de nuevos euros, porque amenazan con volver a abrirlo "en unas semanas".
La pregunta con la que he abierto esta entrada tiene, desde luego, mucho sentido, y mucho más si lo sumamos al hecho de que en el polígono industrial de Huéscar existen alojamientos gratuitos para autónomos y pequeñas empresas que quieran iniciar una actividad. Desconocemos la cantidad de naves disponibles así como los metros cuadrados de cada una, aunque el anterior alcalde nos dijo en una ocasión que serían cedidas por un periodo de tiempo limitado, tres años.
La inversión para poner en marcha una quesera artesanal, según dijo en otra ocasión el GDR a unas personas interesadas en montar una empresa así, sería de unos veinte millones de pesetas. Cierto que una pequeña quesera, abastecida con materia prima (leche) de su propia cabaña, crearía muy pocos puestos de trabajo, quizás dos o tres directos. Pero es que una micro empresa de envasado de miel no costaría más; y una micro empresa de jabones y aceites esenciales, tampoco. Y otras micro empresas artesanales, aún costarían menos. Luego, con mil millones de las antiguas pesetas, y aprovechando las naves que el ayuntamiento pone a disposición, se podrían crear unas 50 micro empresas, o cooperativas. Si cada una generara dos o tres puestos de trabajo, estamos hablando de entre cien y ciento cincuenta puestos de trabajo directos. No es la panacea, pero sería alrededor del 10% de todas las personas desempleadas de Huéscar, PER incluido.
Esto haría que el municipio fuera más sostenible por tres razones fundamentales: estaríamos descargando de gastos a la Junta y al gobierno central, estaríamos aprovechando recursos endógenos que ahora despreciamos en beneficio de otros que, al llegar desde otros lugares, ya no son tan sostenibles, y estaríamos creando riqueza local, implicando en ello a muchas personas, que a su vez mejorarían su economía y contribuirían a mejorar, indirectamente, otras economías locales.
Porque, aunque ya lo hemos repetido muchas veces, seguiremos insistiendo: estos trabajos, estas cooperativas, generan empleos indirectos: comercios donde se vendan esos productos, fabricantes de envases, imprenta, transporte de unas localidades a otras... y los ingresos íntegros se quedan en la comarca. Es decir, cuando yo compre una mermelada estoy contribuyendo a mantener el puesto de trabajo de ocho personas en la comarca: la cultivadora, la elaboradora, la productora de envases, la distribuidora, la impresora, la comercial, la productora de abonos orgánicos, y la administrativa/asesora fiscal. Y si me compro un jersey, estoy contribuyendo a mantener diez el empleo estable de diez personas: la transportista, la lavandera, la cardadora, la hiladora, la teñidora, la ovilladora, la tejedora, la impresora, la administrativa/asesora fiscal, y la comercial. Además, estoy contribuyendo a la salud del planeta, y estoy comiendo sano y vistiendo de calidad.
Y suma y sigue: quien dice mermeladas y jerseis dice miel, tomate, alcaparras, pimiento, especias, vino, queso, licores, almendras, aceite, jabones, mantas y alfombras, objetos de esparto, mobiliario de forja, objetos decorativos en cerámica, lana, espejuelo, cuadros, utensilios domésticos, aislante de viviendas, etc. etc.
Es así de fácil, por más que nuestros técnicos en desarrollo rural y nuestros políticos vuelvan la cabeza.
Por tanto, un hotel Pinar de la Vidriera, completamente inservible, equivale a algunos cientos de puestos de trabajo estable y sostenible, por mucho que nuestros técnicos en desarrollo rural y nuestros políticos sonrían irónica e incrédulamente, y se inclinen más por editar preciosas revistas que hablan de desarrollo sostenible sin saber qué es eso del desarrollo sostenible. Eso cuando no les da por intentar vender el territorio, que también tienen sus temporadas.
Podría poner bastantes más enlaces que hablan del Pinar de la Vidriera, pero no, solo un pequeño detalle, para que se vea con qué interés anunciaba una web el hotel, una vez abierto el verano pasado, que no se sabe si está en Puebla de Don Fadrique (Granada), Huéscar (Granada) o en Huesca (provincia aragonesa del Pirineo). Coinciden, en cualquier caso, que está en Spain...
Villa De Pinar De La Vidriera
Cta. De La Puebla De Don Fabrique, Huesca, Spain, 18830 ( Mostrar mapa )
http://www.booked.net/es/hotel/337464/Villa-De-Pinar-De-La-Vidriera-Huesca_overview.html
Dahira
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