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domingo, 20 de marzo de 2011

Para qué sirve un recinto ferial (versión huesquerina)

El recinto ferial de Huéscar tiene como objetivos "impulsar la producción ganadera de la comarca y fomentar su calidad [...] y apoyar a la agricultura ecológica y potenciar el sector agrícola a través de nuevas técnicas y cultivos alternativos", según leemos en la publicación impresa de Granada Hoy-Comarca de Huéscar, marzo-junio 2011, pg. 14, donde seguimos leyendo "La construcción de este recinto ferial ha contado con una ayuda de más de 1,8 millones de euros , financiada al 50% entre el Ministerio de Medio Ambiente y Marino y la Junta a la que hay que unir la cantidad de 800.000 euros que fue el precio que pagó el Ayuntamiento de Huéscar a la Cooperativa Nuestra Señora de la Soledad por las naves y el solar sobre el que se ubica".

Todos los días son de aprender, y esta mañana de domingo pre-primaveral hemos aprendido que a un recinto ferial se le puede sacar mucha más utilidad de la que hasta ahora se les sacaba a los recintos feriales, que era la de difundir y comercializar, así como la ocupación de plazas hoteleras y servicios de restauración de la zona por los visitantes atraídos por la temática ofrecida en las distintas ferias que ocupen el recinto a lo largo del año, impulsando, de rebote, la venta de artesanías y otros productos locales, así como la afluencia extraordinaria a museos locales y cualquier otra oferta cultural y de ocio que pueda ofrecer el municipio.

En cambio, en Huéscar, van, vamos, muchísimo más allá, y el recinto ferial se va a encargar de impulsar la producción ganadera y desarrollar nuevas técnicas y cultivos agrícolas alternativos. El precio final de la inversión en el ferial lo vale, desde luego. Quizás lo que está equivocado es el nombre, que debería llamarse "Centro de Investigación Agroganadera" en lugar de "Recinto Ferial" para lo que hubiera sido necesario dotarlo de laboratorios y personal que desarrolle las labores propias, en lugar de acondicionarlo con stand de ganado y stand comerciales.

Aunque, a juzgar por lo que añade el mismo texto," dicho recinto dispone de 1.414 metros cuadrados para exposiciones al aire libre, 919 metros cuadrados que alojarán a 40 recintos para la exhibición de ganado y 900 metros para 50 stand y oficinas, entre otras dependencias", no se vislumbran por ningún lado los laboratorios, las granjas y los terrenos de cultivo. Lo que está bastante claro es que la distribución de un espacio, cerrado o abierto, diseñado como stand, por sí solo no fomenta el aumento de la cabaña ovina, ni mucho menos pone en producción cultivos alternativos con aplicación de nuevas técnicas. Hasta ahí llegamos todos y todas, incluso aunque no seamos personas mucho ni poco leídas.

Así que, teniendo en cuenta que en la última feria de la Oveja Segureña los stand expositivos tenían escasísima relación con la oveja (apenas un stand de cencerros y otro de artesanías temáticas de oveja), y no recordamos que tuvieran mayor presencia en anteriores ediciones, salvo en el año 2005-06 donde hubo uno o dos stand de venta de carne fresca de cordero, y que de las posibles futuras ferias agrícolas no sabemos nada de momento, se puede decir que los cuarenta stand al aire libre para la exposición del ganado y, quizás -con suerte, tal vez-, un par de stand comerciales relacionados con la oveja, han costado en total 2.600.000 euros, que traducido a las antiguas pesetas supone cuatrocientos treinta y seis millones de pesetas. Un tercio, probablemente, finaciado por el GDR, ya que a éste es el Ministerio del Medio Marino y Rural quien lo dota económicamente, y otro tercio lo hemos financiado la ciudadanía huesquerina, ya que ha sido el ayuntamiento quien ha comprado los terrenos, y por tanto, ese solar pertenece a la ciudadanía en su conjunto, es de todas y todos.

No se, por tanto, si es que estoy hecha un lío yo, o se han líado los promotores del ferial, con lo que es un recinto ferial propiamente dicho y para qué sirve, confundiendo de la manera más tonta stand expositivos con laboratorios; esta tonta confusión, en los objetivos, o en las declaraciones a la prensa, quizás se deba a la premura con la que han construido el ferial -de la que "el alcalde de Huéscar se mostró muy satisfecho por la realización en tiempo record", según el mismo artículo citado-, ya que las elecciones municipales están a la vuelta de la esquina, y no es cosa de dejar para la última semana las tres o cuatro últimas inauguraciones porque, o se declara semana festiva completa, o a la ciudadanía no le daría tiempo a acudir a todas, y las inauguraciones perderían su sentido más pragmático: sumar votos al partido inaugurante.

DahirA.


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