No a la escultura de mujer arrodillada representando a Mariana Pineda en la Plaza Santa Adela de Huéscar

domingo, 27 de marzo de 2011

Cerramos por no poder atenderlo

Hoy hemos dado por finalizada una etapa de la asociación: el tequio "Made in Altiplano de Granada" de Huéscar que comenzamos hace nueve meses. Varios han sido los factores que nos han llevado a tomar esta decisión, el principal de todos la falta de capital humano. Si es complicado que una asociación sin personal contratado sea capaz de proyectar y organizar iniciativas con regularidad, no en beneficio de la propia asociación, si no con intención de beneficio público mucho más lo es que pueda cumplir un horario estable de mañana y tarde seis días a la semana cuando quienes integran esa asociación son personas productivas, como es nuestro caso. Estábamos cayendo en la doble jornada asociativa, a la que había que añadirle la jornada laboral de producción y la jornada familiar y personal. Demasiadas jornadas diferentes para un solo día y persona. Aún así, hemos sido capaces de mantener el tequio nueve meses, aunque las últimas semanas los horarios de éste, hay que reconocerlo, estaban siendo muy imprecisos. De ahí que no hayamos encontrado otra solución que la de decir basta.

¿Nos ha merecido la pena tanto trabajo y tanta inversión económica? Sí. Sin duda alguna, sí. Por muchos motivos. El de mayor importancia, posiblemente, si nos ponemos a hacer una escala, ha sido la socialización, el contacto humano, el intercambio de impresiones, de opiniones, de saberes y conocimientos compartidos con personas desconocidas. La clase política local se sorprendería si conociera las verdaderas opiniones y sentimientos de la ciudadanía, esos que se expresan sin ningún condicionamiento ante un receptor independiente. A la clase política local, en términos generales, es cierto, la opinión ciudadana no les importa demasiado, por no decir que no les importa nada, salvo cuando se trata del recuento de votos extraídos de las urnas, que al fin y al cabo, son los que los ponen o los quitan en el gobierno y en el poder.

También se sorprenderían las y los políticos locales de la cantidad de personas que nos han felicitado, en varios idiomas, incluido el huesquerino, por la iniciativa de exponer productos comarcales. De igual forma que se sorprenderían si supieran de las personas que han tenido un contacto esporádico con la comarca y que han entrado al tequio, tímidamente, en busca de otra versión de la comarca intentando que les cuadrara la versión oficial que les habían dado de la misma y la realidad que palpaban. Ah, ¡si las paredes del tequio hablaran! El espíritu crítico que tantas veces nos han atribuido y reprochado a DahirA se queda en pañales comparado con otros espíritus críticos menos prudentes que la asociación y que quien suscribe.

Pero el tequio ha sido mucho más, también nos ha enseñado que salvo honrosas excepciones, un pequeño empresario comarcal -terminado en o, de género masculino-, cualquiera de ellos cuya producción está basada en recursos endógenos, no "desciende" hasta una asociación de mujeres, porque así, como un descenso en su nivel social y comercial, es como debían ver la exposición de productos comarcales iniciada y dirigida por Dahira. Asociación de mujeres, pobretonas porque no tienen empleados a su cargo ni un local espacioso y lujoso, y sin los letreritos que dicen que están financiadas por ayuntamiento, GDR, diputación, Junta de Andalucía. Malo, malo: lo que están haciendo no es serio. Lo que demuestra, una vez más, y pese al optimista informe de evaluación del Plan de Igualdad de Huéscar (véase entrada 20/11/10 Objetivos cumplidos: 98%), quien haya dirigido, coordinado y ejecutado el mencionado plan no se ha aproximado siquiera a la punta del iceberg en materia de igualdad de género. Y a lo que hay que añadirle que en la comarca, tanto vales según quien y cuanto te subvenciona. Si no estás subvencionada o subvencionado, o no eres nadie, o eres persona que no acata religiosamente el sistema, y pasas automáticamente al rincón de la marginalidad.

El tequio también ha ejercido, involuntariamente, de oficina de turismo bilingüe, especialmente durante el verano, y de información comercial local. Personas que venían después de haber pasado por la oficina de turismo (lo siento, pero todo hay que decirlo), entraban a pedir información al tequio, atraídas por el nombre, en busca de la información que no habían sido capaces de darles en otros sitios. Cuantas veces hemos indicado como llegar a Orce, donde está situado el museo, que más podían visitar, donde comer, las piscinas de Castril, Castilléjar, Fuencaliente de Orce, el nacimiento del río Castril; o hemos indicado paseos por las badlands o una visita a la piscifactoría; o les hemos descrito Galera, o Castril; o donde localizar espejuelos y como reconocerlos; cuantas veces hemos indicado donde podían comprar un vino local, o camisetas, o postales... cuando hace unos meses un señor en un foro decía que el "Made in Altiplano de Granada" le hacía la competencia desleal a los comercios locales, indudablemente, no sabía lo que estaba diciendo, o solo pretendía fastidiar a la asociación por otras causas, y encontró una vía por ahí.

En el apartado de difusión y comercialización, el producto que más ha enamorado ha sido la serie "Natura" del taller cerámico Algova; el tomate y pimiento de Intergranadina ha creado adictos y adictas; los tapices han viajado a Cataluña y Reino Unido; los colgantes de espejuelo se los han llevado de dos en dos; igual que los broches de oveja o las ovejitas de cerámica esmaltada. Durante final de verano, los visitantes que ya se marchaban se interesaban especialmente por las reproducciones cerámicas del taller Galira. Esto es lo que nos ha dado tiempo a aprender durante estos meses respecto al interés de lo mostrado y a quienes le interesa qué. Lamentamos habernos quedado en este punto, sin llegar siquiera a cifras comparativas de un mismo producto y época. Sería muy interesante que alguien recogiera el testigo y abriera una tienda de productos comarcales exclusivamente, tanto de artesanías como de alimentación y publicaciones. Y si consiguen tener entre sus existencias vino, licores, y vidrio de Castril, nos quitaremos el sombrero una y otra vez. Cuando digo alguien me refiero a alguien auténtico, que crea en el proyecto, que conozca las artesanías y se interese por la ecología; si tiene conocimiento del patrimonio y de la naturaleza comarcal, mejor. Si sabe describir paisajes, otro punto añadido. Pero, por favor, absténganse personas oportunistas y caza subvenciones (no digo que no se acojan a subvenciones, siempre y cuando reúnan el perfil adecuado primero) porque lo único que se conseguirá será una pantomima muy cara que no reflejará los recursos ni el trabajo artesanal de la comarca ni beneficiará a nadie, salvo a la administración que haya colgado el letrerito de "proyecto subvencionado".

Y, por último, aunque no menos importante que lo primero, la asociación hemos puesto en práctica la autocrítica. También nosotras hemos fallado. La falta de capital humano para atender el tequio es incuestionable. Pero en el camino ha ido apareciendo la escasa calidad de compromisos adquiridos por parte de algunas personas, así como la comodidad, el oportunismo, la poca capacidad para asumir y responder críticas negativas hacia la asociación hechas en público, y la escasez de empatía mostrada, así como el extraño concepto de trabajo en equipo o la facilidad para delegar o lanzar ideas para que otras asuman el trabajo y la responsabilidad derivadas. No obstante, al apartado profesional meramente artesano, que unas y otras, sin duda alguna, tenemos, hay que añadir otros valores personales, también de unas y otras, que las cualidades negativas que acabo de mencionar, están ligadas a otras positivas como puedan ser la solidaridad puntual, la capacidad de trabajo puntual, el esfuerzo puntual en tiempo y economía, la creatividad y las ideas; y el tremendo sentido del humor y el activismo puntual. La suma de unas y otras cualidades, es lo que nos embarcó en el proyecto del tequio estable, y de cada uno de los demás que hemos proyectado y realizado hasta el momento. Y, presumiblemente, los que nos quedan por hacer.

Hemos cerrado el tequio, la etapa que más esfuerzo nos ha requerido ¡pero tenemos tanto pendiente por hacer! Entre otras muchas, que en la comarca, nuestra comarca, nuestro lugar, donde está nuestra vida, aprendamos lo que significa de verdad desarrollo sostenible comarcal, y desechemos las extrañas aplicaciones que se le están empezando a dar desde la administración local y otras entidades, que van a llevar a una inevitable degeneración del concepto y a unas prácticas tan insostenibles como las que se han estado funcionando hasta ahora. Y que se valorice la artesanía y se entienda como un sector generador de empleo, si se aplican las políticas adecuadas y sin despilfarrar un euro público, de todos y todas. Y que aprendamos de verdad lo que significa igualdad de género; y lo aprendamos todos y todas, y lo apliquemos con toda naturalidad tanto en público como en privado. Y a quien corresponda, por todos los dioses y diosas, retiren ya la escultura de la mujer arrodillada en la plaza Santa Adela, que estamos en el S. XXI.

Así que la asociación seguimos adelante, con nuevos proyectos personales y asociativos, y con la continuidad de otros comenzados con anterioridad. Y seguiremos, que duda cabe, en este rinconcito de opinión abierto al mundo. Ahora, con más tiempo para observar, buscar información y hasta escribir, posiblemente, lo mimaremos más, le dedicaremos más tiempo. Hasta es posible que tengamos tiempo para acudir a los plenos municipales cámara de vídeo en mano, para conocer en primera instancia qué decisiones adoptan los políticos y las políticas de cercanía en nombre de la ciudadanía a la que representan .

¡Salud!

DahirA.

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