En la Plaza SOLuciones, como ya ha sido bautizada la Puerta del Sol madrileña, son los y las que están, y muchos y muchas más. Entre los cientos de anécdotas de las que se cuentan aquí y allí, hasta en los medios políticamente correctos desde hace un par de días, porque antes seguramente, no es que pretendieran ocultar el hecho de la primera manifestación, que también, es que seguramente no creyeron que tuviera ni relevancia ni futuro. Si los sindicatos, dos semanas antes, en el Día Internacional de los Trabajadores, fecha por excelencia, de grandes manifestaciones reivindicativas, apenas habían conseguido raquíticas manifestaciones ¡que iban a conseguir cuatro jóvenes, de esos de la Generación NiNi convocando por internet!.
Pero ahí está la continuidad de la manifestación 15M, acampada, no solo en Madrid, sino en otras ciudades, esta tarde, el mapa de ciudades en las que hay convocadas concentraciones, acampadas y caceroladas era bastante extenso, en España sobre todo, pero también en Europa, América ¡incluso han llegado a Japón, Tailandia y Australia!. Qué equivocados y equivocadas estábamos con la Generación NiNi: es la Generación NoNo.
Entre las numerosas anécdotas, como decía, me ha llamado la atención un artículo que cuenta la vinculación de una señora con la AcampadaSol. Una señora de armas tomar, como la califica el periodista autor del artículo, y de una solidaridad sin contemplaciones ni banderas.
Y tiene razón Dª Concha: los (y las) de Sol tienen hambre: de trabajo, de vida digna, de justicia social. Y también, claro está, de arroz con leche madrugador y tortilla de patatas para desayunar y espantar la humedad de la noche y el suelo en el que han dormido, los y las que hayan podido, y que constituyen su arsenal de pacífica lucha. Y saben agradecer los gestos solidarios. Y saben lavar cacerolas y vasos de plástico para que puedan ser reutilizados.
DahirA.
1 comentario:
Publicar un comentario