jueves, 26 de febrero de 2009
Día de Andalucía
jueves, 19 de febrero de 2009
Día Internacional de la Mujer
Los días internacionales se crearon para visibilizar un problema que afecta a personas de cualquier país o región; difundirlo para sensibilizar sobre el y reivindicar soluciones.
El Día Internacional de la Mujer Trabajadora, que en sus inicios tuvo distintas fechas, hasta que definitivamente se consolidó en la del 8 de marzo, comenzó reivindicando el voto femenino, mejoras laborales y salariales para las mujeres que estaban en profunda desventaja respecto a los hombres en ese campo.Conforme se conseguian mejoras en estos apartados, siguieron les siguieron otras reivindicaciones: el acceso de las mujeres a los anticonceptivos, a la educación, el derecho a alegir la profesión, a denunciar a los maltratadores y acosadores, al divorcio, al trabajo ...
Sin embargo, parece que en este año de 2009 ya no hay nada que reivindicar pública y abiertamente. Que todas las mujeres tenemos trabajos dignos. Que las tareas domésticas se distribuyen equitativamente entre los hombres y las mujeres. Que los hijos crecen en igualdad. Que ha desaparecido el analfabetismo. Que todas las mujeres tienen acceso a la sanidad y la educación. Que no se lapida o condena a ninguna mujer por infidelidad conyugal. Que las redes de transportes públicos son magníficas y nos permiten movernos con total libertad. Que no hay discriminación laboral. Que las guarderías laborales han llegado a todos los rincones del planeta. Que se ha erradicado la prostitución. Que han desaparecido los malos tratos de género. Que todas tenemos acceso a las Nuevas Tecnologías. Que nacer mujer en algunas regiones no supone el asesinato o el abandono. Que todas las mujeres tienen derecho al voto y a ocupar cargos políticos o empresariales de relevancia. Que todas los asociamos en libertad, sin tutelas de nadie.
En definitiva, que ninguna mujer del planeta, sea niña, adulta o anciana, nace, crece, estudia, trabaja y vive en desigualdad respecto a los hombres, y puede decicir sobre cualquier aspecto de su vida libremente, solo por su condición de persona, de ser humano; sin mas etiquetas. Y sin leyes, condicionamientos sociales, económicos, educacionales, culturales y religiosos que se lo impidan. Sin nadie que permita una injusticia en ese aspecto.
Por eso, a falta de necesidades que reivindicar, este año 2009 celebraremos el Día Internacional de la Mujer en la intimidad; familiar, social, asociativa, laboral. Dándole a este día un carácter meramente festivo, con alguna incursión cultural, que nunca está de más.
¿O es quizás que nos hemos acostumbrado a mirarnos el embligo y que estamos bien así, y a nosotras que nos importa lo que les ocurra a las mujeres en otros lugares, si la culpa de que no tengamos trabajo nosotras la tienen los políticos, si a mi marido no lo voy a cambiar y además es buena persona y trabajador, si yo vivo mucho mejor de lo que vivía mi madre, si a mi hija -gracias a Dios- no le falta de nada?
¿O es tal vez que todavía no nos creemos a nosotras mismas, y tenemos miedo?.
¿O es posible que tengan miedo de nuestra fuerza y han diseñado una inteligente estrategia por la que nos han seducido para que nos mantengamos calladas, "que estamos más guapas"?. Calladas pero entretenidas, eso si. Que los tiempos avanzan.
Preguntas sin respuesta. Entre otras razones, por que este blog lo sigue una sola persona. A la que eso si, damos las gracias y le enviamos también nuestro abrazo grande, por los comentarios tan positivos que nos deja. Y que, curiosamente, es un hombre.
Dahira.
viernes, 13 de febrero de 2009
Si las mujeres mandáramos ...
... el mundo sería mejor. Esa es la popularizada frase con la que zanjamos muchos debates y que, es necesario decirlo, tiene un origen hembrista.
Es cierto que las mujeres tenemos menos oportunidades de dirigir y gobernar, o nos damos a nosotras mismas menos oportunidades, en aras de otras prioridades personales, sociales o estrategias profesionales y, a veces, profundamente condicionadas u obligadas por el carácter político de los gobiernos y la legislación vigente en la época y los paises en los que nos ha tocado nacer y vivir.
Pero también es cierto que las mujeres cometemos los mismos errores que los hombres. Y las causas son las mismas en unos y otras: falta de organización, objetivos difusos o demasiado personalistas, conceptos equivocados de responsabilidad y compromiso, escasa capacidad de análisis, baja autoestima geográfica, querencia de poder, empatía poco desarrollada ...
El martes pasado se celebró en Diputación de Granada -con el permiso de las inclemencias climatológicas, por las que tuvieron que suspenderla hasta en tres ocasiones, y que ya tenían desconcertada a la compañera Mara, de naturaleza tan positiva ella- la Asamblea del Consejo de la Mujer, donde se votaba la Viceprecidencia y a las Representantes de las catorce Comarcas de la provincia. La jornada transcurrió con total normalidad, y quedó formado el consejo -al que, por cierto, Dahira, que nos presentábamos a ambas modalidades, no pertenecemos, por una cuestión de pura democracia: no obtuvimos votos suficientes-.
De democracia en cuanto a la Vicepresidencia -6 votos frente a 15, por tanto, nada que objetar-. Respecto a la Representante Comarcal, a última hora surgió otra candidata que reclamó su mayor derecho a representar a la Comarca de Huéscar, apoyada por las representantes de tres asociaciones de la Comarca de Baza. Cotilleos, ironías y otras minucias aparte, el resultado es que la Comarca de Huéscar, finalmente no tiene representante en el Consejo de la Mujer, ya que la representante de última hora es la Federación de Asociaciones de Mujeres del Altiplano Granadino, comarca que no existe a efectos de la división realizada por Diputación para el Consejo de la Mujer. Y que además, en la FAMAG están federadas asociaciones tanto de la Comarca de Baza como de la Comarca de Huéscar.
Por tanto, algo falla. O se elimina la Comarca de Baza, y a su representante, y se agrupan las dos comarcas -Baza y Huéscar- en una nueva, Altiplano, y se mantiene la representante de la Federación. O se retira la FAMAG porque no existe la comarca del Altiplano. O las doce asociaciones que están inscritas en la Comarca de Huéscar se quedan sin representante. Por que si nos atenemos a que la FAMAG es representativa del tejido asociativo de las dos comarcas, nos sobra una comarca en el recuento: la de Baza. Y si nos atenemos a que tal vez -y decimos tal vez, no que tengamos la seguridad, que no la tenemos en absoluto- la Presidenta de la FAMAG se dejó influir por las representantes de las de las asociaciones de la comarca de Baza, a la sazón, compañeras de federación, y a falta de la presencia de otras asociaciones de la Comarca de Huéscar -Dahira no cuenta, y como asociación fuimos la única asistente de la Comarca de Huéscar- esta no es representativa de las dos comarcas, si no de una, y no exactamente de Huéscar ...
En fin, que con tanta comarca nos hemos ido por los cerros de Úbeda, lo que queriamos decir es que las mujeres mandamos, cuando tenemos opción o nos la permitimos a nosotras mismas, igual de mal que los hombres. O igual de bien. Sin excepciones. Dependiendo de otros factores que nada tienen que ver con el sexo. Y que unas y otros deberíamos aprender a corregirnos cuando se trata de "mal hecho", queridas compañeras, queridos compañeros ...
Dahira.