Coincidiendo con la inauguración oficial por la rehabilitación del edificio conocido por "La granja" y también por "La pródiga" -por el título de la novela de Pedro Antonio de Alarcón, que según distintos indicios es el lugar donde el escritor recrea la novela-, en el pantano del Negratín, la Mancomunidad de Municipios de Baza, junto con DahirA y el inestimable trabajo de Gregorio, uno de los propietarios del Hotel La Alcanacia, se organizó y montó una exposición de pintura, forja, madera, cerámica y tapices, que todavía permanece abierta los fines de semana, de 11 de la mañana a 2 de la tarde.
Merece la pena acercarse hasta La pródiga por varias razones: el entorno paisajístico, a pesar de que en estos momentos las aguas del Negratín están muy bajas; el propio edificio, del s. XVI, magnifico en su sobria arquitectura exterior y el color rojizo de sus piedras, muy similar al de la Alhambra, así como el mirador, los jardines y las fuentes. Y el interior, amueblado y decorado con antiguedades y piezas de almoneda, que le confieren un aire de finales del s. XIX delicado y sutil.
Y naturalmente, por la Exposición de Artistas del Altiplano, albergada en la sala de exposiciones de la planta baja del edificio. Nos sorprendió el numeroso público que hasta ahora ha visitado el edificio y la exposición. Ya el primer fin de semana nos quedamos sin catálogos -250 editados-, y teniendo en cuenta que solamente se quedaban un catálogo por grupo de personas, la afluencia está siendo muy significativa.
Esta exposición co-organizada por Dahira quiere mostrar una parte de lo que es nuestra cultura actual, de la creatividad que genera el Altiplano. Y es también una dignificación de las artesanías que se producen en el Altiplano, unas innovadoras, otras históricas, pero todas ellas con un fuerte componente cultural y creativo, en un segundo intento -el primero fue la exposición en el Centro Cultural Santo Domingo de Baza que Dahira organizamos en Semana Santa- de sensibilizar en artesanía, tan denostada en esta comarca, donde hasta hace poco se asociaba a personas jubiladas, amas de casa y manualidades y a cosas del pasado. Y que tan a menudo se confunde con empresas, cuando en realidad hay que decir autoempleo -o empleo por cuenta propia, como queramos llamarlo-, porque eso es lo que somos: personas que trabajamos por nuestra cuenta.
Los artesanos y artesanas somos personas creativas, reivindicativas, e innovadoras, así como transmisoras de culturas ancestrales, cuya herramienta para plasmar esas ideas, filosofías y cultura son nuestras manos, después de haber aprendido delicadas y, a veces complejas, técnicas. Somos profesionales, pero no dirigimos empresas. Dirigimos nuestras ideas, nuestras manos y nuestros conocimientos de técnicas altamente cualificadas. Nada mas.
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